Cogidita de su mano conocí
a Jesús Crucificado.
Me llevaba con frecuencia
a visitarlo.
Rezagada y temerosa observaba
como sus pies besaba emocionado
Hija, en la penas y alegrías...
Cierto día me contó:
"Corrí hacia El enamorado, a dar
las gracias por el sí que tu madre
me había dado...
Hoy visito con frecuencia a Jesús
Sacramentado, de mi padre y mio.
Por los dos amado y le doy las gracias
en lo bueno y lo malo.
Begochu, 2014
No hay comentarios:
Publicar un comentario